Este es el Cuarto de la serie LAS DIVERSIDADES DEL ESPIRITU SANTO, conformada por 5 artículos. Las solemnes Bienaventuranzas que marcan el inicio del Sermón de la Montaña, el primero de los sermones de Nuestro Señor en el Evangelio de San Mateo (5, 3-10).
LOS POBRES EN EL ESPIRITU
Mat 5,3: Se les llama pobres “de espíritu” porque por su propia voluntad están dispuestos a soportar por amor de Dios. Una dolorosa y humilde condición, incluso, aunque realmente sean ricos y felices; mientras que por otro lado, los realmente pobres, pueden no alcanzar esta pobreza “de espíritu”.
LOS MANSOS
Mat 5,4. El “pobre de espíritu”, está próximo al “manso”, sujeto de la segunda bienaventuranza. Esta es una frase tomada del Salmo 36 (versión hebrea, 37),11, donde se refiere a la Tierra Prometida de Israel, pero, aquí en las palabras de Cristo, es por supuesto sólo un símbolo del Reino de los Cielos, el reino espiritual del Mesías.
LOS PACIENTES
Mat 5; 5 Los motivos del llanto, no derivan de las miserias de una vida de pobreza, abatimiento y sometimiento, que son las mismos de la bienaventuranza del versículo 3, sino más bien, los de las miserias que el hombre piadoso sufre en sí mismo y en otros, y la mayor de todas, el tremendo poder del mal por todo el mundo. A tales dolientes, el Señor Jesús les trae el consuelo del reino celestial, “la consolación de Israel” (Lucas, 2, 25) predicha por los profetas, y especialmente por el Libro de la Consolación de Isaías (11-66)
HAMBRE Y SED DE JUSTICIA
Mat 5,6 Lo primero de todo, “hambre y sed” de justicia: Un deseo fuerte y continuo de progreso, en perfección moral y religiosa, cuya recompensa será el verdadero cumplimiento del deseo, el continuo crecimiento en santidad.
LOS COMPASIVOS
Mat 5:7 Por medio de éstas, los misericordiosos logran la misericordia divina del reino mesiánico en esta vida y en el juicio final. La maravillosa fertilidad de la Iglesia, en obras e instituciones de misericordia corporal y espiritual de toda clase, muestra el sentido profético, por no decir el poder creativo de esta sencilla palabra del Maestro divino
LOS LIMPIOS DE CORAZON
Mat 5,8: El “corazón puro”, es la simple y sincera buena intención, el “ojo sano” de Mt, 6, 22, Este “ojo sano” o “corazón puro”, es más que todo lo precisado en las obras de misericordia (versículo 7) y celo (versículo 9) en beneficio del prójimo.
LOS QUE TRABAJAN POR LA PAZ
Mat 5,9: Los “pacíficos,” (versículo 9) son no sólo los que viven en paz con los demás, sino, que además, hacen lo mejor que pueden para conservar la paz y la amistad entre los hombres y entre Dios, y para restaurarlas cuando han sido perturbadas.
LOS PERSEGUIDOS POR CAUSA DE LA JUSTICIA
Mat 5,10. Los “pacíficos”, son, no sólo los que viven en paz con los demás, sino, que además, hacen lo mejor que pueden para conservar la paz y la amistad entre los hombres; y entre Dios y el hombre, y para restaurarlas cuando han sido perturbadas.
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LOS VEINTE CARISMAS DE PABLO